EN CASA DE AYDARHAMAD MUBARAK

EN CASA DE AYDARHAMAD MUBARAK

Aquélla tarde los vientos se colaban sin piedad a través del Corredor Whakham mientras deambulábamos entre las ruinas de un castillo medieval, un castillo derruido, además de por el clima duro y hostil, por siglos de destrucción y guerras. De allí, pasamos a ver los restos de la Estupa de Vrang. 

El Budismo viajó hacia Occidente a través del Corredor pero después los musulmanes se encargaron de cepillárselo. – ¡No vaya usted a mear en el monumento, es un lugar sagrado!, me dijo el barbudo guardián de la zona. No llegué a saber si el “barbudo” había visto a alguien miccionar allí ni que vio en mi para pensar eso. Tan sólo, con cierta destemplanza, le dije que yo solo meaba en las fachadas de las casas normales. Poco después, mascando el polvo, llegamos al pueblo de Yang. Aquí encontramos un oasis de confort y tranquilidad, la “homestay” o casa de huéspedes de Jakhani. Un aposento delicioso, dulce y confortable, muy lejos de los desastrosos y cutres hoteluchos que habíamos visitado hasta ese momento. Y, bien es cierto, que no hay nada mejor que hable de una persona que la decoración y el calor de una casa. Aquí, en el Corredor Whakham, en las entrañas de la Tierra, con todos los vientos asiáticos zumbando sobre el esqueleto de los pueblos, montañas y ruinas medievales, encontramos un remanso de paz y cultura propiciada por su propietario, el sr. Aydarahad, descendiente del sufí Mubarak Kadam, un venerable personaje que vivió en la zona. Nada más entrar me impresionó la mirada de Lala, la mayor de las hijas, de gran belleza y la cautivadora sonrisa de la pequeña Aisha, que lejos de todo, se afanaba con sus estudios. Aydarahad nos agasajó con té y frutos secos, pero sobre todo, deleitándonos con la música proveniente de antiquísimos instrumentos, mientras nos comentaba que acababa de inaugurar un pequeño museo con el que pretendía recopilar la historia de este camino milenario. Aydarahad con su pequeña gran iniciativa estaba poniendo un gran aporte de compromiso con la historia. Poco antes de despedirnos me dijo, - me gusta mucho el flamenco Sr Faustino.

Yang, Corredor Whakham, Tadjikistán. 

Octubre 2016, Jerez Mayo 2019.

©Texto y fotos: Faustino Rodríguez Quintanilla.

Viajes Alventus | Viajes diferentes | www.alventus.com