Ya de regreso, intentando digerir tanto como hemos visto... sorprendente. Hace dos años aterricé por primera vez en Norteamérica, conocí Nueva York y sus alrededores y me gustó sobremanera. Ahora he visitado California y me nos ha sorprendido para bien.
Tomo prestado el título de la famosa película de Fellini.
Sales de tu ciudad, invadida por miles de motoristas (sólo constato), ruedas por las autopistas y llegas a Cañar, al margen..., en la Alpujarra retirada.
Gilberto, “Don Gil”, es un joven indio que vende bisutería en San Cristóbal de las Casas. Gilberto es simpatizante del EZLN y de su causa, un romántico empedernido y un nómada. El Ejército Zapatista de Liberación Nacional puso a Chiapas en el plano internacional hace ahora 20 años.
Me encontraba a gusto esta mañana, el aguacero de anoche había asentado el polvo reinante de la tarde anterior, cuando estuvimos visitando los templos milenarios de Lalibela, entre moscas y calor. Esta mañana me sentía un poco como mi admirado RL Stevenson mientras escribiera “Travels with a donkey”.