Nada nos hubiera llevado a la pequeña aldea de Joffreville si no fuera porque se trata de un poblado a la entrada del Parque Nacional de la Montaña de Ambar.
"Un camarada de a bordo que se va, se va para siempre, y a ninguno de estos volví a ver yo nunca. Pero hay días en que la corriente del recuerdo rechaza con fuerza el oscuro río de los Nueve Meandros.